Los coches diésel y de gasolina tienen los días contados
La era de los motores de combustión interna (ECI) llega a su fin. En
algunos países, principalmente de Europa y Asia, la fecha de defunción
se producirá antes; en otros, tendrá lugar más tarde, pero la revolución
de los coches eléctricos ya se ha iniciado y la realidad se impone: la
electrificación del transporte es uno de los pilares básicos de la lucha
contra el cambio climático y así lo van entendiendo los gobiernos. La
toma de posiciones es lenta y, de momento responde a cuestiones de salud
y medioambientales, pero en breve -la fecha de consenso se sitúa en
torno a 2025- los motivos serán estrictamente económicos.
Los últimos países en sumarse al club del coche eléctrico han sido Israel y Dinamarca. Con ellos ya son 14 los países que han establecido una fecha de eliminación de ICE, según los datos recopilados por el Centro para la Protección del Clima (CCP),
una organización sin fines de lucro con sede en California que trabaja
para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los datos muestran que Europa lidera los esfuerzos de eliminación
gradual de los ICE. Austria, Dinamarca, Francia, Alemania, Irlanda, los
Países Bajos, Noruega y el Reino Unido han establecido fechas para
deshacerse de las nuevas ventas de automóviles de combustibles fósiles.
Portugal y España, por su parte, ofrecen incentivos al vehículo
eléctrico.
Asia solo tiene cuatro países que han anunciado prohibiciones de ICE.
Pero el impacto de la eliminación gradual podría ser significativo dado
el tamaño de las naciones involucradas. Corea del Sur tiene un objetivo
oficial de que el 30% de todas las ventas de autos nuevos sean
eléctricas para 2020; India apunta a prohibir todos los ICE para 2030, y
China y Taiwán pretenden seguir su ejemplo para 2040. Japón, como
España y Portugal, ofrece actualmente incentivos para la adquisición de
vehículos eléctricos.
Otros dos países en la lista son Israel, que planea suspender las
importaciones de ICE a partir de 2030, y Costa Rica, la única nación en
las Américas en considerar una prohibición de automóviles diésel y de
gasolina, que comenzará a eliminar a partir de 2021.
Los datos recopilados por el CCP permiten trazar la desaparición de
los ICE en Eurasia en el próximo cuarto de siglo. Para el año 2025,
basándose en las prohibiciones anunciadas hasta ahora, los ICE saldrán
de Austria, Japón, Noruega, Corea del Sur, España y Portugal.
Cinco años después, para 2030, las prohibiciones también deberían
haber entrado en vigor en Dinamarca, Alemania, India, Irlanda, Israel y
los Países Bajos, aunque existe cierta incertidumbre sobre si se logrará
el objetivo de la India, en particular.
Y para 2040, China, Francia, Taiwán y el Reino Unido deberían haberse
unido a la lista. Escocia, por su parte, está preparada para imponer
una prohibición a partir de 2032, por delante del resto del Reino Unido.
Aunque el número total de países con prohibiciones anunciadas todavía
es pequeño, el tamaño de naciones como China e India significa que para
2040, alrededor de 3.300 millones de personas, o aproximadamente el 43%
de la población mundial, ya no tendrá acceso a nuevos vehículos ICE.
Esto supone que los objetivos actuales permanecen en pie. Si bien es
probable que muchos países no logren cumplir sus objetivos, hay un
creciente impulso a las prohibiciones de ICE. De acuerdo con los datos
del CCP, siete países anunciaron movimientos para eliminar los ICE el
año pasado, incluidos China e India. En lo que va del año, otros cinco
se han sumado a la lista.
El CCP también señala que se está realizando una gran cantidad de
actividades adicionales de eliminación gradual a nivel estatal o de
ciudad. Enumera 25 ciudades en todo el mundo, incluidas Los Ángeles,
Ciudad de México y Seattle, donde existen políticas vigentes para
limitar los ICE.
Fuente: elperiodicodelaenergia.com